miércoles, 30 de julio de 2014

REFLEXIONES SOBRE LA GUERRA DE ISRAEL CONTRA LOS PALESTINOS

Gaza en crisis. Reflexiones sobre la guerra de Israel contra los palestinos

Bajo el título genérico de Gaza en crisis, Noam Chomsky e Ilan Pappé reflexionan sobre las distintas formas de violencia que, desde hace más de sesenta años, Israel emplea con los palestinos.

Sus voces, de las más autorizadas, poseen registros distintos: en Chomsky, Israel/Palestina es un epítome de la visión imperial del capitalismo estadounidense; para Pappé, historiador israelí, es materia de estudio y de supervivencia moral. Según Chomsky, somos cándidos: siempre tendemos a "infravalorar la eficacia de la violencia", lo útil que es para el que la ejerce. Conforme a su análisis, el Estado de Israel se ha construido apostando una y otra vez por el expansionismo y la colonización frente a la seguridad. En los momentos decisivos (partición de 1947, guerra de 1967, invasión del Líbano en 1982, masacres de Gaza de 2008-2009) la brutalidad ha sido la estrategia israelí contra la "amenaza" de un acuerdo político. Los réditos de esta violencia han sido múltiples: confiscación imparable de territorios, limpieza étnica sostenida, política de hechos consumados, alienación de la ciudadanía israelí, militarización de la vida pública. Incluso en el plano de las relaciones internacionales Israel ha conseguido legalizar de facto su ejecutoria, gracias al apoyo de Estados Unidos. El libro, que va alternando capítulos de cada autor, no es precisamente monocorde. La apuesta ilusionada de Pappé por un Estado único, multiconfesional y multiétnico, de resonancias binacionales, que parta de la reparación histórica, moral y legal de la Nakba (la limpieza étnica de Palestina de 1948), no casa con el escepticismo general de Chomsky. Para Pappé, el problema no es sólo la negación de la Nakba histórica, sino su continua actualización, hoy manifiesta en la guetización de Cisjordania y en la mera idea del desplazamiento forzoso de los palestinos israelíes. Ante esta situación, Pappé se transforma en activista que explica y defiende los beneficios del boicot académico y económico a Israel. Chomsky, si acaso, confía en Gaza, en su historia de resistencia agónica, para que no se produzca el politicidio, el asesinato de Palestina como nación, que él, siguiendo al sociólogo israelí Baruch Kimmerling, pronostica.

Gaza en crisis. Reflexiones sobre la guerra de Israel contra los palestinos
Noam Chomsky e Ilan Pappé
Edición de Frank Barat
Traducción de Miguel Marqués
Taurus. Madrid, 2011

martes, 29 de julio de 2014

EL TORMENTO DE GAZA- NOAM CHOMSKY

El tormento de Gaza y los crímenes de Israel son nuestra responsabilidad




A las tres de la madrugada del 9 de julio, en medio del más reciente ejercicio de la barbarie israelí, recibí la llamada telefónica de un joven periodista palestino en Gaza. Al fondo podía escuchar los gritos de su hijo pequeño en medio de las explosiones y el rugir de los jets que disparaban contra cualquier civil que se moviera, y también contra hogares.
Este joven acababa de ver estallar por los aires a un amigo suyo, quien circulaba en un vehículo claramente marcado como de prensa. Alcanzaba a escuchar los gritos que provenían de la casa vecina, tras la explosión, pero no pudo salir por temor a convertirse en blanco.
Se trata de un barrio tranquilo. No hay objetivos miliares... a excepción de los palestinos, quienes son el blanco de la maquinaria de alta tecnología que Israel posee gracias a que Estados Unidos se la proporciona.
Mi amigo dijo que 70 por ciento de las ambulancias fueron destruidas, y que de todos los muertos y heridos cerca de dos tercios son mujeres y niños. Muy pocos activistas de Hamas han sido víctimas de los bombardeos. Siempre son las víctimas acostumbradas.

Es importante entender lo que es la vida en Gaza cuando Israel se comporta de manera moderada entre una crisis y otra. Una buena representación de esto la reportó el representante de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados, Mads Gilbert, el valiente físico experto de nacionalidad noruega, quien ha trabajado mucho tiempo en Gaza y vivió la cruel y asesina operación Plomo endurecido. En todos aspectos, la situación es desastrosa.
Sólo en lo que respecta a los niños, Gilbert reporta: “Los niños palestinos en Gaza sufren inmensamente. Gran cantidad padece desnutrición por las condiciones impuestas por el gobierno israelí, debido al bloqueo al territorio palestino de Gaza. La anemia es común en todos los mayores de dos años, a los que afecta en 72.8 por ciento. Desnutrición, baja talla y bajo peso afecta, respectivamente, a 34.3, 31.4 y 31.45 por ciento de todos los niños del territorio. Estos índices empeoran, según cada nueva medición.
Cuando Israel se porta bien al menos dos niños palestinos son asesinados cada semana, y este patrón se ha mantenido durante los últimos 14 años.
La causa de fondo es la ocupación criminal de los territorios palestinos y todas las medidas que se adoptan en Gaza para que su población sobreviva apenas, mientras los palestinos de Cisjordania son obligados a mantenerse dentro de cantones inaccesibles, todo lo cual pone a Israel en una violación flagrante del derecho internacional y resoluciones explícitas del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, por no hablar de una mínima decencia humana.
Y así continuará mientras Israel sea apoyado por Washington y tolerado por Europa, para nuestra vergüenza eterna.

Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2014/07/16/index.php?section=opinion&article=027a1mun
(Traducción: Gabriela Fonseca)

GAZA EN CRISIS

Gaza en crisis. Reflexiones sobre la guerra de Israel contra los palestinos

Bajo el título genérico de Gaza en crisis, Noam Chomsky e Ilan Pappé reflexionan sobre las distintas formas de violencia que, desde hace más de sesenta años, Israel emplea con los palestinos.

Sus voces, de las más autorizadas, poseen registros distintos: en Chomsky, Israel/Palestina es un epítome de la visión imperial del capitalismo estadounidense; para Pappé, historiador israelí, es materia de estudio y de supervivencia moral. Según Chomsky, somos cándidos: siempre tendemos a "infravalorar la eficacia de la violencia", lo útil que es para el que la ejerce. Conforme a su análisis, el Estado de Israel se ha construido apostando una y otra vez por el expansionismo y la colonización frente a la seguridad. En los momentos decisivos (partición de 1947, guerra de 1967, invasión del Líbano en 1982, masacres de Gaza de 2008-2009) la brutalidad ha sido la estrategia israelí contra la "amenaza" de un acuerdo político. Los réditos de esta violencia han sido múltiples: confiscación imparable de territorios, limpieza étnica sostenida, política de hechos consumados, alienación de la ciudadanía israelí, militarización de la vida pública. Incluso en el plano de las relaciones internacionales Israel ha conseguido legalizar de facto su ejecutoria, gracias al apoyo de Estados Unidos. El libro, que va alternando capítulos de cada autor, no es precisamente monocorde. La apuesta ilusionada de Pappé por un Estado único, multiconfesional y multiétnico, de resonancias binacionales, que parta de la reparación histórica, moral y legal de la Nakba (la limpieza étnica de Palestina de 1948), no casa con el escepticismo general de Chomsky. Para Pappé, el problema no es sólo la negación de la Nakba histórica, sino su continua actualización, hoy manifiesta en la guetización de Cisjordania y en la mera idea del desplazamiento forzoso de los palestinos israelíes. Ante esta situación, Pappé se transforma en activista que explica y defiende los beneficios del boicot académico y económico a Israel. Chomsky, si acaso, confía en Gaza, en su historia de resistencia agónica, para que no se produzca el politicidio, el asesinato de Palestina como nación, que él, siguiendo al sociólogo israelí Baruch Kimmerling, pronostica.

Gaza en crisis. Reflexiones sobre la guerra de Israel contra los palestinos
Noam Chomsky e Ilan Pappé
Edición de Frank Barat
Traducción de Miguel Marqués
Taurus. Madrid, 2011
308 páginas. 19,95 euros
Luz Gómez García, Diario El País - España

domingo, 27 de julio de 2014

Bloqueo informativo sobre Gaza: un enemigo a vencer


por Amy Goodman, con la colaboración de Denis Moynihan
Según información de Naciones Unidas, durante los últimos dos días ha sido asesinado un niño por hora en Gaza. En total, el ejército israelí ha asesinado a más de 700 palestinos, en su amplia mayoría civiles, desde el comienzo de los ataques contra Gaza hace más de dos semanas. Detalles de la masacre salen a la luz en medios de comunicación de todo el mundo y dan horrenda cuenta de niños asesinados en la playa, de bombardeos contra unidades de cuidado intensivo de hospitales, de trabajadores de emergencia médica asesinados por francotiradores israelíes mientras buscaban heridos entre los escombros. Las organizaciones de la resistencia armada de Gaza, principalmente el brazo armado del gobierno electo de la zona, Hamas, han lanzado miles de cohetes de fabricación casera que han provocado la muerte de tres personas en Israel. Desde que Israel inició su invasión terrestre a Gaza han muerto más de 30 soldados israelíes. Una de las mayores dificultades para poder comprender la situación en Israel y los territorios palestinos ocupados es obtener información confiable. Esta última ofensiva contra Gaza reafirma el papel clave que desempeñan los medios masivos de comunicación estadounidenses en mantener el bloqueo informativo. Pone de relieve además la creciente importancia de la presión que ejercen las redes sociales.
Hay un titular que lo dice todo: “Misil en café de playa de Gaza encuentra a clientes reunidos para ver la Copa Mundial de Fútbol”. Este titular fue publicado por el periódico New York Times en referencia a un misil lanzado por Israel, que causó la muerte de al menos ocho personas en una playa de la localidad de Khan Younis en Gaza. Ali Abunimah, destacado periodista palestino-estadounidense cofundador del sitio web The Electronic Intifada, publicó irónicamente en Twitter: “Misil israelí pasa por café de Gaza para tomar algo y conversar con sus amigos palestinos”. La extraña y pasiva formulación del titular original desató una tempestad de comentarios en las redes sociales. Ali Abunimah se refirió a ello en el programa de DemocracyNow!: “Es muy simple, el titular del New York Times hace pensar que el misil de Israel pasó por el café para mantener una amistosa conversación. Pero lo que el misil hizo en realidad fue volar en mil pedazos a varias personas que habían ido a la playa a fin de escapar del horror de la matanza que lleva a cabo Israel en el resto de Gaza para mirar un partido de la Copa Mundial de Fútbol como miles de millones de personas en todo el mundo. Y murieron allí. Eso es lo que sucedió. Pero no es eso lo que surge del titular del New York Times”. Finalmente, el New York Times reemplazó el titular por: “Buscan entre escombros de café de Gaza a víctimas que habían ido a ver un partido de fútbol”.
No se trata de la primera vez que un importante medio de comunicación recibe un golpe por su cobertura de esta última ofensiva contra Gaza. El 16 de julio, el periodista de NBC Ayman Mohyeldin fue testigo de un ataque israelí perpetrado en una playa de Gaza que causó la muerte a cuatro niños que jugaban al fútbol. Tras el mortal ataque, las explícitas publicaciones en Twitter de Mohyeldin alarmaron al mundo con la noticia. Su tuit decía: “Cuatro niños palestinos asesinados en un ataque aéreo israelí. Minutos antes de que fueran asesinados frente a nuestro hotel, yo estaba jugando a la pelota con ellos #gaza”. Mohyeldin publicó que eran todos primos hermanos. Y publicó también sus nombres y sus edades:
“1) Ahed Atef Bakr, 10 años
2) Zakaria Ahed Bakr, 10 años
3) Mohamed Ramez Bakr, 11 años
4) Ismael Mohamed Bakr, 9 años”
Ayman Mohyeldin se trasladó rápidamente al hospital Al-Shifa y presenció el momento en que la familia Bakr se enteró del asesinato de los niños. Lo normal hubiera sido que el testigo presencial del hecho diera la noticia, pero en lugar de ello, apareció en la pantalla del programa NBC Nightly News el periodista Richard Engel informando desde Tel Aviv. El periodista ganador del Premio Pulitzer Glenn Greenwald me contó durante el programa de noticias de Democracy Now! lo que sabía respecto a la decisión tomada por la NBC en relación a Mohyeldin luego de que informó sobre las muertes: “Lo que resulta increíble en realidad es que, más tarde, ese mismo día, luego de lo que podría considerarse el mayor, o uno de los mayores sucesos de la carrera periodística de Mohyeldin, tras provocar realmente un gran impacto en la comprensión que el mundo tiene de lo que está pasando en Gaza, no sólo le impidieron aparecer al aire para hablar de ello en NBC News, sino que además le ordenaron abandonar Gaza inmediatamente”.
Las redes sociales se encendieron en señal de protesta, con el hashtag #letAymanreport (“dejen-que-Ayman-informe”, en español). El viernes por la noche, NBC anunció que Mohyeldin regresaría a Gaza. Mohyeldin publicó en Twitter: “Gracias por todo su apoyo. Regreso a #Gaza para informar. Orgulloso del permanente compromiso de la NBC con dar cobertura al lado palestino de la historia".
Sin embargo, en los estudios de NBC, el problema no estaba resuelto. Rula Jebreal es una escritora y analista política palestina. Trabaja como colaboradora externa para el canal de noticias MSNBC, donde, durante una entrevista efectuada esta semana, criticó la cobertura sobre Gaza realizada por esa cadena de televisión por cable.
“Somos ridículos. En relación a este tema, nuestra cobertura es asquerosamente parcial. Miren [cuánto] tiempo de aire destinan diariamente [al Primer Ministro Benjamin] Netanyahu y los suyos los programas de este canal. Nunca he visto que entrevisten a ningún palestino en relación a los mismos temas”. Poco después, Rula publicó en Twitter: “¡Mi próxima aparición en televisión fue cancelada! ¿Existe alguna relación entre lo que expuse y la cancelación?" Si bien el presentador de MSNBCChris Hayes valientemente la invitó a su programa para hablar sobre sus críticas, Jebreal no está segura de que le renovarán su contrato.
A comienzos de esta última ofensiva contra Gaza, le pregunté a Joshua Hantman, alto asesor del embajador de Israel en Estados Unidos, acerca de la creciente cifra de muertos, la mayoría de los cuales son civiles. Su respuesta provoca escalofríos: “Seré honesto, la precisión es espectacular. No ha habido otro ejército en la historia del mundo que de hecho haya utilizado blancos de tanta precisión”. El terror y la muerte sembrados por la precisión de la cual se enorgullece Hantman quedan claros día tras día gracias a la labor de demasiados pocos periodistas valientes, que reciben apoyo de una ciudadanía mundial comprometida que hace uso de las redes sociales para vencer el bloqueo impuesto por los medios masivos de comunicación tradicionales.

Denis Moynihan colaboró en la producción periodística de esta columna.
© 2014 Amy Goodman
Traducción al español del texto en inglés: Fernanda Gerpe. Edición: María Eva Blotta y Democracy Now! en español, spanish@democracynow.org
Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero internacional que se emite diariamente en más de 800 emisoras de radio y televisión en inglés y en más de 450 en español. Es co-autora del libro "Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos extraordinarios en Estados Unidos", editado por Le Monde Diplomatique Cono Sur.

sábado, 19 de julio de 2014

NIÑOS DE LA FRONTERA

Niños de la frontera: “No hablan inglés, pero entienden el odio”

Publicado el 18 de julio de 2014
Amy Goodman, con la colaboración de Denis Moynihan
El periodista ganador del premio Pulitzer José Antonio Vargas le puso un rostro público a la crisis de la inmigración que atraviesa Estados Unidos, tras haber sido detenido esta semana por la policía fronteriza en McAllen, Texas. Varias horas más tarde y después de protestas a nivel nacional, Vargas fue liberado. Dio a conocer por primera vez su situación de inmigrante indocumentado hace tres años en un artículo publicado en la revista New York Times y, desde entonces, su principal tarea ha sido luchar por una reforma de la política de inmigración estadounidense. Vargas había viajado a Texas para apoyar a miles de niños inmigrantes indocumentados que actualmente están detenidos allí por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Muchos niños continúan huyendo de la violencia en sus países de origen en Centroamérica, en busca de seguridad y teniendo que enfrentar grandes riesgos en tierras lejanas. En Estados Unidos, el problema suele caracterizarse como una “crisis fronteriza”, pero no se trata de eso. Estamos asistiendo al fracaso de la globalización económica y de la política exterior de Estados Unidos, exacerbado por políticas de inmigración inadecuadas e ineficaces a nivel nacional. Las víctimas más recientes de esta situación son los niños que llegan a través de la frontera en busca de seguridad, pero, sin embargo, son cruelmente encerrados en grandes galpones y trasladados en buses a otros centros de detención. En el trayecto, deben soportar las amenazas de hordas extremistas que se oponen a la inmigración, para luego ser deportados a sus países de origen, donde corren riesgo de vida.
Decenas de miles de niños cruzan la frontera desde México hacia Estados Unidos, sin la compañía de adultos, tras recorrer miles de kilómetros en condiciones muy peligrosas, a menudo viajando en los techos de los trenes de carga que son controlados por bandas criminales. Los trenes son conocidos como “La Bestia”. Los niños que se suben a ellos deben pagar tarifas muy elevadas y a muchos de ellos los golpean, los roban, los violan e incluso los matan en el trayecto hacia el norte. Algunos tienen la esperanza de reencontrarse con sus padres en Estados Unidos, otros son enviados al extranjero por sus propios padres para evitar que sus hijos sufran la violencia endémica de sus ciudades natales: lugares como San Pedro Sula, el centro económico de Honduras, que actualmente es considerada la ciudad donde se registran más asesinatos en el mundo.
El flujo de niños ha superado la capacidad del Gobierno de Estados Unidos de hospedarlos y alimentarlos, y especialmente de brindarles el nivel de atención que es adecuada para los niños refugiados. En respuesta a esto, el Gobierno ha trasladado a los niños a diferentes lugares en el suroeste del país.
Esta situación significó una oportunidad para los grupos xenófobos y racistas de lograr la atención de los medios por haberse enfrentado a los buses que trasladaban a los niños. En la ciudad de Murrieta, en California, un pequeño grupo de personas estaba protestando contra el traslado de un grupo inmigrantes a esa ciudad. Enrique Morones, director de la organización sin fines de lucro Border Angels (Ángeles de la frontera), se enteró de lo que estaba sucediendo y se dirigió de inmediato al norte para verlo con sus propios ojos. Morones dijo en el programa “Democracy Now!”: “Fue una escena horrible ver a los niños en el bus y a sus madres llorando. No hablan inglés, pero entienden el odio”.
Enrique Morones comparó la escena con lo sucedido en Selma, Alabama, 50 años atrás, cuando la policía bloqueó el paso de la Marcha por el Derecho al Voto y luego desató una feroz represión llena de odio: “Quiero dejar bien claro que fue la policía de Murrieta, y no los manifestantes, la que obligó a los tres buses a regresar. Mientras los buses se acercaban, la policía de Murrieta se interpuso y les impidió el paso, algo que no tiene ningún sentido debido a que podrían haber continuado su trayecto hasta la oficina de la policía fronteriza. Así que le pregunté a un oficial ‘¿Por qué detienen a los buses aquí?’ Y, a continuación, un manifestante se acercó y otros lo siguieron y de los cincuenta manifestantes que estaban allí, alrededor de la mitad se pararon delante del bus, al igual que unos veinticinco o treinta trabajadores de los medios, y comenzaron a golpear el bus. Los manifestantes golpeaban el bus con la bandera de Estados Unidos, mientras gritaban insultos raciales”. Fue la intervención policial lo que dio a pie a los manifestantes.
Todas las partes involucradas deberían prestar atención al mensaje pronunciado esta semana por el Papa Francisco sobre, en sus propias palabras, las “decenas de miles de niños que emigran solos, sin ser acompañados, para huir de la pobreza y de la violencia”: “Es una emergencia humanitaria que requiere, como primera medida urgente, que los niños sean bien recibidos y protegidos”. El Papa abordó otro asunto fundamental en su mensaje: “Sin embargo, estas medidas no serán suficientes a menos que estén acompañadas de políticas que informen a las personas sobre los peligros del viaje y, sobre todo, que fomenten el desarrollo en sus países de origen”, afirmó.
Estados Unidos tiene una larga y sanguinaria historia de desestabilizar gobiernos democráticos en los mismos países que ahora son la fuente de esta última oleada inmigratoria, especialmente Honduras, Guatemala y El Salvador. En las décadas de 1980 y 1990, los regímenes militares y paramilitares, que contaban con el apoyo de Estados Unidos, mataron a cientos de miles de ciudadanos en esos países. Los cárteles de drogas de la actualidad son los herederos de esa cultura de violencia. En Honduras, Estados Unidos apoyó el golpe de Estado de 2009 contra el presidente electo democráticamente Manuel Zelaya. Después de su derrocamiento, dos regímenes sucesivos apoyados por Estados Unidos han contribuido a lo que la catedrática de la Universidad de California Dana Frank denominó “la intensificación de la violencia y la anarquía”. Dana Frank afirmó: “El golpe en sí mismo fue un acto criminal y realmente dio paso a la corrupción generalizada de la policía y en todos los niveles del Gobierno. Y eso significa que básicamente es posible matar a quien sea, sin recibir un castigo por ello”.
José Antonio Vargas, que llegó a Estados Unidos como un niño indocumentado hace más de 20 años, resumió la situación desde Texas: “Cuando tienes nueve, diez u once años no sabes lo que significa que te llamen ‘ilegal’. No entiendes cómo el enfrentamiento político que está ocurriendo afecta tu vida, pero esto es exactamente lo que ha venido sucediendo. El modo en que muchos medios de noticias y el modo en que muchos opinólogos y el modo en que muchos políticos, en particular los republicanos, hablan sobre esta crisis humanitaria es una afrenta a Estados Unidos y a los estadounidenses. Hace algunos días, el titular de una noticia de CBSnews.com decía: ‘¿El aumento de los niños inmigrantes ilegales es una amenaza a la seguridad nacional?’ Ese era el titular. Estos niños no son ilegales, son seres humanos. Y no son una amenaza para la seguridad nacional. La única amenaza que representan estos niños es la amenaza de poner a prueba nuestra propia conciencia”.

© 2014 Amy Goodman
Traducción al español del texto en inglés: Mercedes Camps. Edición: María Eva Blotta y Democracy Now! en español, spanish@democracynow.org
Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero internacional que se emite diariamente en más de 800 emisoras de radio y televisión en inglés y en más de 450 en español. Es co-autora del libro "Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos extraordinarios en Estados Unidos", editado por Le Monde Diplomatique Cono Sur.

jueves, 10 de julio de 2014

GAZA BOMBARDEADA


El Ejército israelí mató a 23 personas este martes en intensos bombardeos aéreos en la Franja de Gaza y se plantea una operación terrestre contra este territorio palestino.
Entre las víctimas figura Hafiz Hamad, líder de la Jihad Islámica, cuya vivienda fue alcanzada por fuego aéreo y causó la muerte de cinco de sus familiares.
El Ejército israelí también anunció la muerte de cuatro palestinos que ingresaron en Israel por mar y atacaron una base militar con ametralladoras y granadas.
El brazo armado de Hamas reivindicó esta acción, pero no dijo haber registrado víctimas, afirmando que sí había numerosas víctimas israelíes.
En Gaza, desde el comienzo de su operación “Protective Edge” (“Barrera protectora”), el lunes a medianoche, la aviación israelí efectuó decenas de ataques.
Además de las muertes se registraron alrededor de cien heridos.
El ataque más sangriento se produjo en Jan Yunis, en el sur de la Franja, donde un misil lanzado contra una casa mató a siete personas, entre ellas dos adolescentes. También hubo 25 heridos.
El ataque fue “dirigido contra la casa de la familia Al Kaware, en el sur de la Franja de Gaza”, dijo a la AFP el portavoz de los servicios de emergencia Ashraf al Qudra.
Según testigos, un avión teleguiado israelí lanzó una bengala de advertencia, que llevó a vecinos y allegados a rodear la casa señalada como objetivo, para tratar de protegerla. Pero poco después, un avión F-16 disparó un misil que destruyó la vivienda.
Hamas calificó este ataque de “espantoso crimen de guerra”, y advirtió que “todos los israelíes se han convertido en blancos legítimos de la resistencia” palestina.

“Golpear duro a Hamas”

Un portavoz militar, el general Moti Almoz, dijo que han recibido órdenes de “golpear duro a Hamas” y confirmó que Israel se plantea una ofensiva terrestre. Este martes ya había decenas de tanques apostados en la frontera con Gaza y se habrían convocado a 40 mil reservistas.
“Estamos dispuestos a librar una batalla contra Hamas que no terminará en unos pocos días”, advirtió el ministro de Defensa, Moshe Yaalon.
Según el Ejército israelí, 50 cohetes lanzados desde Gaza cayeron en el sur de Israel ayer, sin causar víctimas, y la Fuerza Aérea de Israel atacó 150 “posiciones”.
EEUU afirmó que estaba preocupado por los civiles de Israel y de Gaza, indicó Josh Earnest, portavoz de la Casa Blanca y exhortó al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a que mantenga abierto un canal diplomático con los palestinos para resolver la crisis.
LibreRed / Ciudad CCS

jueves, 3 de julio de 2014

Lo poco que informan los medios



fuente: Democracy Now
Los territorios ocupados de Cisjordania están sufriendo los peores enfrentamientos en años tras el secuestro y asesinato de un adolescente palestino. El cuerpo quemado de Mohamed Abu Khudair, de diecisiete años de edad, fue encontrado en un bosque cerca de Jerusalén el miércoles. Los palestinos culparon a los habitantes de asentamientos israelíes de llevar a cabo un ataque en venganza por el asesinato de tres adolescentes israelíes cuyos cuerpos fueron encontrados a principios de esta semana. El padre de Khudair dijo que la policía israelí no respondió adecuadamente al secuestro de su hijo.
Hussein Abu Khudair expresó: “Lo secuestraron. Lo agarraron y se fueron. Los muchachos los persiguieron. Iban camino a Ramot por las vías del tren. Toda la carretera tiene cámaras. Los muchachos llamaron a la policía, vinieron enseguida y nos dijeron, así que llamamos a la policía. Su teléfono funcionaba. Le dimos su número a la policía, y todo. No ayudaron en nada.”
Horas después de que se hallara el cuerpo de Khudair, las fuerzas israelíes dispararon balas de goma a decenas de jóvenes palestinos en las calles de Jerusalén Este y otras partes de Cisjordania. Según informes, más de 200 palestinos resultaron heridos, entre ellos cuatro periodistas. El Presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, culpó a la política de asentamientos de Israel en los territorios ocupados de Cisjordania por la muerte de Khudair, afirmando que “los asentamientos están atacando al pueblo palestino todos los días”. El asesinato del adolescente palestino sigue a los llamamientos de venganza por parte de líderes políticos israelíes y una marcha donde los manifestantes coreaban “muerte a los árabes”. En respuesta, cientos de israelíes se congregaron en Jerusalén el miércoles para protestar contra la incitación a la violencia.
Mia Diamond declaró: “No estamos aquí con una postura política ni nada. Que un niño muera bajo cualquier circunstancia es horrendo y triste. Lo que dicen los oradores aquí es que la respuesta ante la muerte y la violencia no debería ser más violencia”.
Israel también realizó ataques durante la noche sobre Gaza, hiriendo cerca de una decena de personas, una de gravedad. Los combatientes palestinos lanzaron cohetes al sur de Israel unas horas antes.

La Casa Blanca condena el asesinato del adolescente palestino

El gobierno de Obama ha instado a todas las partes a actuar con moderación. En Washington, el secretario de Prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest, dijo que Estados Unidos condena el asesinato del adolescente palestino.
Josh Earnest afirmó: “Estados Unidos condena en los términos más enérgicos posibles el atroz asesinato del adolescente palestino Mohammed Hussein Abu Khudair. Enviamos nuestras condolencias a su familia y al pueblo palestino. Tomamos nota de que el Primer Ministro israelí Netanyahu ha pedido a las autoridades policiales que trabajen para cuanto antes sea posible identificar a los perpetradores y los motivos detrás de este acto atroz y esperamos ver rápidamente a los culpables ante la justicia”.

Comisionada de la ONU condena los cohetes de Gaza y los ataques “excesivos” israelíes

Los recientes disturbios siguen también a las incursiones masivas israelíes en Cisjordania y los ataques aéreos sobre Gaza que han matado unos doce palestinos desde mediados de junio. Los críticos dicen que el gobierno de Israel ha explotado el secuestro de los adolescentes para castigar a la Autoridad Palestina por el acuerdo de unidad con Hamas y los recientes esfuerzos para procurar el reconocimiento internacional al unirse a las convenciones de la ONU. Hablando hoy en Ginebra, la Alta Comisionada por los Derechos Humanos, Navi Pillay, dijo: “Desde el punto de vista de los derechos humanos, condeno totalmente los ataques [palestinos] con cohetes y más particularmente condeno los actos excesivos de represalia de Israel”.